Primera Parte
Sin dudas que los Acuerdos Comerciales traen consigo beneficios no sólo comerciales, sino para la economía de un país en su conjunto, ya que no solo reducen o eliminan barreras arancelarias, sino que mejoran sustancialmente la competitividad de las empresas. Un aspecto importante por señalar es cómo estos influyen en la capacidad inversora de grandes empresas. Para los inversionistas les permite incrementar su flujo de inversión extranjera generando más certidumbre y estabilidad y así poder permitir competir de igual forma en el mercado internacional, obteniendo ventajas sobre países que no han negociado acuerdos comerciales preferentes, además permiten aumentar la fuerza laboral derivados de una mayor capacidad exportadora.
Pero la pregunta es ¿Quién es el inversor?, necesariamente aquel que cuenta con un capital importante de dinero y experiencia connotada en los mercados internacionales, no necesariamente. Cuando un país suscribe un acuerdo comercial, como es el caso de Chile que posee acuerdos de Alcance Parcial, de Complementación Económica, de Cooperación Estratégica y los de Libre Comercio, es importante poder conocer como nuestro producto se beneficia en el mercado de destino. Las empresas, indistintamente su tamaño, accede a un mercado como socio, a un costo menor que antes de la implementación de ese acuerdo, permitiendo en algunos, ingresar con un acceso preferencial e incluso se verán beneficiadas aquellas empresas que utilicen insumos y/o bienes de capital provenientes del país socio, ya que los costo de importación se verán reducidos o bien eliminados, es por ello, que es necesario que las Pymes que deseen internacionalizarse identifiquen los beneficios que existen y puedan sacar el máximo provecho de ellos.